Decir Johnny Pacheco es sinónimo de La Fania All-Stars y viceversa. Pero también es lo mismo que decir aquello de ‘música latina’ o ‘nuestra cosa latina’ en los 60 y 70 donde miles de boricuas y latinos se las buscaban en el melting pot neoyorquino.
Pacheco –dominicano de nacimiento– fue arreglista, flautista, corista, productor, pero más que todo el líder indiscutible de esta famosa cuadrilla de jóvenes latinos que, por decir algunos nombres, estuvo protagonizada por Héctor Lavoe, Cheo Feliciano, Ismael Miranda, Ray Barreto y Celia Cruz.
A sus 17 o 18 años, Jorge Vargas no cantaba ni tocó instrumentos en esa salsa corpulenta del 60 y 70, sino que en sus manos descansaba plasmar la imaginación de la Fania en uno de los primeros contactos que tiene la gente con la música: las carátulas de los discos.
Para Vargas, Pacheco era La Fania. “Era la persona behind the scenes, detrás de toda la producción en el sentido musical”, señaló el diseñador gráfico en entrevista con Metro. Pacheco falleció el pasado 15 de febrero a los 85 años en la ciudad de Nueva York.
Aunque a Vargas nunca le tocó diseñar una carátula para un disco de Pacheco, sí dibujó al ‘Maestro’ Pacheco en varias ocasiones incluyendo un cartel para un concierto celebrado en 1977 en el que le acompañarían Celia Cruz, Pappo Lucca y Justo Betancourt. “Ese cartel me lo pidió Izzy Sanabria, que era el director del estudio, nos reunimos y me dijo: ‘hay que hacer este cartel rápido”, recordó.
El primer diseño de Vargas en una carátula de La Fania fue ilustrar el logotipo en el disco “Metiendo Mano” de Rubén Blades y Willie Colón en 1977. En 1979 también diseñó la carátula de “Rican/Struction” de Ray Barreto mientras laboró en el estudio Latino Communications de Sanabria.
“[Pacheco] es una figura extremadamente importante, un visionario. Hizo tanto y también era manejador, hacía los arreglos musicales. Fue el líder indiscutible de todo esto…Y tenía un oído para esto”, agregó Vargas, quien contó que resultaba imprescindible poner un disquito en pasta de La Fania mientras les dibujaba alguna carátula o afiche. El ilustrador también rememoró que Pacheco fue uno de los que impulsó el primer volumen de Asalto Navideño, el mítico disco de temas navideños del trombonista Willie Colón, Héctor Lavoe y el cuatrista Yomo Toro.
Y que no se nos olvide que Pacheco también compuso el cántico de la comunidad puertorriqueña y latina: “Mi Gente”, el cual fue interpretado por Héctor Lavoe.
“Lo mágico de esta cuestión en ese movimiento que ocurrió en Nueva York en los 70 y fue bien interesante porque apelaba a los jóvenes y dentro de cada uno ayudó a muchos puertorriqueños allí a conocer sus raíces a través de la música”, comentó Vargas, quien también recordó sus vivencias en la Gran Manzana donde luego de salir de un turno de trabajo se daba la vueltita por clubes como Casablanca para presenciar las descargas salseras.
Pacheco, sin duda, estuvo en todas. ‘El Zorro de Plata’, como le llamaban algunos, se acomodó en el mapa con su inseparable flauta y su pachanga. Pero también incitó joyas salseras como “La Perfecta Combinación” con Pete ‘El Conde’ Rodríguez y “Tremendo Caché” con Celia Cruz.
Vargas, ahora con 70 años, echa un poco para atrás y recuerda sus afiches en la 42 y Broadway invitando a conciertos y bailables de salsa en discotecas y hasta en el templo del Madison Square Garden.
“La aportación de La Fania y la música latina en Nueva York en los 60 y 70, ahora la valorizo cada vez más. Jamás pensé que a estas alturas 40 o 50 años después esta gente fuera tan vigente todavía como lo está ahora. Es una cosa increíble y es admirable”, señaló Vargas.
Sadot Santana Miranda