Se ha mudado al otro barrio mi querido amigo y colega músico, Roberto Roena (Rohena).
Excelente bailarín, percusionista, bongosero, director de orquesta y amigo leal, Roberto empezó su carrera con el grupo de Rafael Cortijo y su Combo, con Ismael Rivera.
Lo vimos a principios de los 60’s, cuando Cortijo fue a Panamá por primera vez, y nos quedamos maravillados con este bongosero, que tocaba campana mientras bailaba.
Roberto se convirtió en un ídolo de la afición salsera y sus esperadas visitas con Cortijo en febrero, para Carnavales, eran recibidas siempre con entusiasmo en Panamá. Luego de la salida de Ismael Rivera y la disolución del Combo original de Cortijo, miembros de esa orquesta decidieron crear un nuevo grupo al que denominaron, «El Gran Combo» de Puerto Rico. Roena, que sentía agradecimiento por Cortijo, no se unió inicialmente a sus ex compañeros y en cambio ingreso al grupo de Mario Ortiz, y su «All Star Band». Solo después que Cortijo decidió irse a probar suerte a New York fue que Roena que deseaba quedarse en Puerto Rico, acepto integrarse permanentemente al «Gran Combo».
En su primer viaje a Panamá con esa banda, él y Andy Montañez. por casualidad me oyeron cantar mientras me acompañada con una guitarra. Desde entonces, cada vez que el «Gran Combo» visitaba a Panamá yo me les aparecía por su hotel, Roberto y Andy siempre me atendieron con afecto.
Para 1967, Roberto Roena había formado su propio grupo, «Los Megatones» aunque continuó con el «Gran Combo» hasta 1969, año en que debuta su grupo, «Apollo Sound». Con «Los Megatones», Roena había ensayado formas de fusion entre el «jazz» y la «salsa», Con el «Apollo Sound» elevo la apuesta y creo un «Big Band», alcanzando la aceptación del público con temas como, «Tu loco loco», «Con los Pobres estoy» (Agüita de Ajonjolí), «El Escapulario», «Que se sepa» y «Mi desengaño».
Roberto me grabo «Para ser Rumbero» e hice un cameo en uno de sus discos.
Siempre estuvo pendiente de lo que hacía y creo que él fue uno de los que le recomendó a Ray Barretto que me diese una oportunidad para cantar en el grupo que formo luego de la salida de su cantante estelar, el gran Roberto «Tito» Allen. Con Roberto pase excelentes momentos. Fue miembro fundador de la «Fania All Stars», y uno de mis mejores compañeros dentro de esa agrupación.
Siempre travieso, amante de las bromas y poseedor de un ingenio fulminante, Roberto me hizo reír, sentirme bien y su amor por la música y la experimentación y fusión musical fueron un ejemplo constante para todos, muestra de ello, el «Bossa» en «Mi desengaño».
A su familia, seres queridos, amigos y «fans» en todo el mundo, envío mi pésame.
Adiós Roberto, tu trabajo y memoria siempre vivirán, igual que nuestro agradecimiento por todas las contribuciones y ayudas que nos dejas.
Siempre «Coro Miyare», Robe!
Rubén Blades
24 de Septiembre, 2021