Hay cantantes que aunque transcurran los años no dejan de cantar con la excelencia de antaño.
Ese es el caso del Eterno Guapachoso Adalberto Santiago, quien a los 82 años canta en los mismos tonos, no ha perdido brillantez, ingenio para el soneo y un dominio de la clave extraordinario.
El pasado viernes fue la atracción del espectáculo Noches de Galería, celebrado en la plaza pública Rey Fernando de Carolina, ante una multitud que bailó y gozó con sus éxitos que interpretó acompañado por la Orquesta Abran Paso del percusionista Luisito Figueroa.
Esta banda, que promueve actualmente su segundo disco “Salsa Radio-Activa”, despunta como una de las que más toca en Puerto Rico. Durante poco más de 20 años, Abran Paso ha sido fiel y celoso custodio de la salsa en la tradición de Fania. Originalmente, Luisito la organizó para acompañar al Judío Maravilloso Larry Harlow y al Niño Bonito Ismael Miranda, tanto así que acuñaron como nombre el título de un álbum y un éxito muy popular de la Orchestra Harlow.
Adalberto se ha convertido en su padrino y es al cantante cialeño que le dedican su nuevo álbum porque desde sus inicios la Estrella de Fania los respaldó. El viernes Adalberto se presentó en Carolina y se sintió muy feliz al observar que el pueblo lo quiere y respeta, que se sabe sus canciones y coros y que disfruta bailar su música.
Adalberto es un artista que honra la tradición y, hoy por hoy, junto a Ismael Miranda y Bobby Cruz, representa con su veteranía un movimiento sociocultural de la salsa que, a partir de 1971, tras la grabación de la Fania All Stars en el Cheetah, recorrió el Mundo.
Se fueron Cheo, Pete Conde, Quintana, Santitos, Celia y Héctor Lavoe, pero Adalberto sigue deleitando al pueblo salsero con su maña y sabor. Anoche en Carolina arrancó sólidos aplausos con un repertorio selecto que consistió de “Borinquen me llama” (del disco “Louie y sus Amigos” de Louie Ramírez), “Al ver sus campos” (del lp “Rican Struction” de Ray Barretto) y el popurrí de boleros “Cada vez” y “La noche de anoche” (de su primer cd con la Típica 73).
Sus éxitos con Barretto, “La hipocresía y la falsedad” y “Oye la noticia”, entre otros, fueron bailados y tarareados por la grey salsera congregada en Carolina. Igualmente fue muy aplaudida su interpretación de “Viento en popa”, que en 1966 grabó con la orquesta de Willie Rosario y cuya nueva versión, sabrosa por demás, estampó en “Salsa Radio-Activa” de Abran Paso.
Fue una inolvidable velada de salsa que confirma que este género sigue gozando de gran arraigo popular. Lo que se necesitan son tarimas y la visión de promotores que reconozcan que es una expresión intrínseca a la identidad puertorriqueña.
El pasado viernes fuimos testigos de que hay Adalberto Santiago pa’ rato y que la Orquesta Abran Paso, capitaneada por Luisito Figueroa, ha reconocido el talento de El Guapachoso, que no pierde cadencia ni dominio del montuno y que el simple hecho de presenciarlo en concierto es evocar la época de oro de Fania, que representa humilde y magistralmente.
Fundación Nacional para la Cultura Popular