LAS VEGAS – “¡Aquí estamos mi gente!”. De esta manera, el cantante Jerry Rivas dio la bienvenida al público que se levantó de sus asientos para recibir con vítores a El Gran Combo de Puerto Rico en su reciente visita a Las Vegas. El legendario grupo musical, portaestandarte de la música tropical, demostró su orgullo patrio y maestría profesional interpretando con precisión un repertorio de clásicos y algunas nuevas tonadas.
Sus integrantes se presentaron vestidos de gala, luciendo confiados, alegres y prestos para hacer un recorrido histórico-musical durante 90 minutos de entrega.
La presentación comenzó con Me Liberé, uno de sus grandes éxitos, que fuera nominado al premio Grammy. Los presentes de inmediato comenzaron a cantar a coro con Rivas, Anthony García y Joselito Hernández.
“¿Cuál canción quieren que les cantemos?”, preguntó Rivas. Ámame, Y no hago más ná y Ojos Chinos, fueron algunas de las peticiones hechas a viva voz y que la Universidad de la Salsa se dio a la tarea de interpretar.
El auditorio del Hotel Tropicana, donde se presentó el espectáculo, se convirtió en un improvisado salón de baile, pues muchos de los asistentes comenzaron a bailar en plena sala. Los que no bailaban en pareja, lo hacían desde sus asientos, cantando a coro con el grupo y ondeando con orgullo la bandera puertorriqueña.
Uno de los momentos más emocionantes se produjo cuando Rivas anunció que cantarían Brujería, un número que estrenaron en 1979 y que ahora tiene más de 50 millones de visitas en la plataforma Tik Tok.
Las voces de Rivas, García y Hernández se armonizan y se complementan a la perfección. Hernández, quien se unió al grupo en 2017, ha dicho que “estoy viviendo el sueño de mi vida”, mientras que García, miembro desde el 2015, ha mencionado que El Gran Combo “es una Universidad donde tengo el privilegio de aprender de la veteranía de estos maestros.”
Los cantantes se hablan con la mirada y con gestos mínimos se comunican con los instrumentistas: unos verdaderos profesionales de la música. Es imprescindible mencionar que tanto los músicos, así como los cantantes, dominan completamente el escenario.
Rivas, quien se unió al Combo en 1977, dijo: “tengo 68 años, pero aquí estoy, gracias a Dios y a ustedes. Todavía me queda voz para largo,” arrancando carcajadas y aplausos.
El pentagrama del Gran Combo incluyó además Un verano en Nueva York, La loma del tamarindo, Arroz con habichuelas, Azuquita pa’l café, No hay cama pa’ tanta gente y el Menú – Qué le pongan salsa. Como se dice en puertorriqueño: el lugar se quería caer de la emoción. Al final de la velada musical, Rivas agradeció a los presentes.
“Es lindo verlos aquí. Es como estar en la islita”, dijo a los boricuas en el recinto.
“Hemos sido adoptados por países latinoamericanos de los cuales nos sentimos identificados también,” añadió en reconocimiento a otros grupos latinos.
El Gran Combo, creación de Rafael Ithier, quien fue mencionado con respeto, sigue dando cátedra de profesionalismo. Esta presentación, en celebración de su primera visita a Las Vegas hace 45 años, demostró que la tradición de excelencia impuesta por sus integrantes originales Ithier, Andy Montañez, Pellín Rodríguez, Roberto Roena, entre otros, está en buenas manos y hay Gran Combo para rato.